Las plantas de cannabis pueden verse afectadas por la aparición de hongos, generalmente se debe a condiciones ambientales que predisponen su aparicion: temperatura alta y elevada humedad ambiental. Ya sea un cultivo interior o de exterior, es importante tomar una serie de recaudos para evitar su aparición. Saber en principio, que si nuestro cultivo ya se vio atacado una vez por hongos, posiblemente hayan quedado esporas en el ambiente. 

Es importante destacar, que ante todo, es necesario que las plantas cuenten con buena salud.

Por eso desde Meristema, te acercamos una serie de consejos para evitar que tus plantas se vean afectadas. 

¿Cómo prevenirlos? 

Todo nuestro espacio debe estar lo más limpio e higiénico posible. Si vamos a utilizar herramientas, como tijeras o macetas reutilizadas, deben estar esterilizadas para matar todo tipo de microorganismo patógeno presente. Si el espacio se utilizó anteriormente, evitar que quede suciedad acumulada, ya que sería un foco de contaminación.

Podemos preparar nuestro sustrato inoculandolo con microorganismos benéficos, como Trichodermas; evitar la compactación del suelo ya que eso genera retención de humedad y pueden aparecer hongos o pudrirse las raíces; aplicar preventivos foliares o en riego; cuando hagas trasplantes podes aplicar micorrizas, que son hongos protectores del sistema radicular de la planta. 

En indoor, un dato clave es tener un buen sistema de ventilación con interacción y extracción que genere un flujo continuo de aire, de esa manera la humedad y temperatura no se concentrará dentro del área de cultivo. 

Si tenes en exterior, recomendamos inocular microorganismos en la tierra, aplicar preventivos foliares no a punto de goteo y utilizar una barrera física como un nylon transparente para cubrir las plantas durante la temporada, así evitarás que los días lluviosos se acumule agua entre el follaje de las plantas; como extra, se puede agregar un sistema de ventilación que permita un recirculado del aire.